Escaleras: arquitectura del movimiento
Más que un simple medio para conectar niveles, la escalera es un mapa de poder, visibilidad y movimiento. Su forma y ubicación determinan cómo se habita un espacio, quién accede a dónde y qué se revela o se oculta. En lo doméstico, en lo institucional o en la ciudad, cada escalera es un relato que se escribe con pasos: un lugar donde el cuerpo negocia con la arquitectura, donde lo funcional se vuelve simbólico y lo cotidiano, político.
Moda y Arquitectura: Cuando el cuerpo encuentra su espacio
La moda y la arquitectura se encuentran en un terreno común donde vestir y habitar son actos que comparten lógica. La primera transforma el cuerpo en topografía; la segunda convierte el espacio en experiencia sensorial. Pasarelas, tiendas y montajes escénicos borran las fronteras entre objeto y lugar, creando mundos que construyen tanto como protegen. En este cruce, lo efímero y lo permanente se entrelazan para replantear cómo habitamos y cómo nos mostramos.
Trazar genealogías: el diseño como herencia consciente
A veces, entender una obra arquitectónica no requiere una nueva mirada, sino una más larga. Una que no se detenga en el autor ni en la fecha de construcción, sino que retroceda, que se sumerja en todo aquello que la hizo posible: los referentes, las decisiones heredadas, el contexto histórico, los gestos acumulados, las tensiones no resueltas. Una mirada que reconozca que toda arquitectura es, en el fondo, una conversación.
FUN PALACE
El 5 de junio, el Centre Pompidou inauguró un experimento arquitectónico llamado Fun Palace en el Grand Palais de París. Inspirado en el icónico proyecto utópico del arquitecto canadiense Cedric Price, el espacio transforma el Grand Palais en un laboratorio vivo, donde el objetivo es experimentar nuevas formas de estar juntos e interactuar.
Sobre influencias indígenas en la arquitectura latinoamericana
Hay algo profundamente poderoso en reconocer que no todo lo que nos inspira debe ser conquistado. Que no toda influencia debe traducirse en apropiación, ni todo conocimiento transformarse en estética. Que existen formas de aprender que no buscan dominar, sino escuchar, en muchos casos reinterpretar lo tradicional. En la arquitectura, esto se vuelve urgente cuando miramos hacia las cosmovisiones indígenas de nuestro continente. ¿Cómo podemos hablar de influencia sin caer en la explotación cultural? ¿Cómo construir desde el respeto, el diálogo y la reciprocidad?
Los murales como arquitectura de la memoria colectiva
En América Latina, donde lo público es muchas veces escenario de disputa, el muralismo se convirtió en una forma de arquitectura expandida: una que no construye con ladrillos, sino con símbolos; que no delimita funciones, sino que propone memorias.