


No. 3 La Influencia
Toda obra tiene un eco. A veces es evidente: una forma que se repite, un gesto que reconocemos. Otras veces es más sutil, como una intuición compartida, un susurro del pasado que aún informa nuestras decisiones. En este número de Tresefes, decidimos detenernos en ese eco. En eso que influye —sin siempre mostrarse— y que, sin embargo, transforma.
“La Influencia” no es un tema menor. Es una pregunta esencial para la arquitectura y el diseño en América Latina, donde cada decisión proyectual está atravesada por capas históricas, tensiones contemporáneas y herencias que se resisten al olvido. No nos interesa la influencia como imitación, sino como conversación. Como diálogo entre generaciones, entre territorios, entre prácticas que se entrecruzan.
Creemos que toda arquitectura es una conversación —con lo anterior, con lo posible, con lo que aún no ha sido nombrado—. Diseñar no es partir de cero, sino aceptar que cada trazo lleva consigo otros trazos, otras historias. Heredamos estructuras, intuiciones, preguntas sin resolver. Pero también tenemos el poder —y la responsabilidad— de transformarlas.
Este número no busca encontrar un origen puro. Nos interesa más bien trazar líneas que se cruzan, tensiones que se resisten a resolverse, influencias que se reconocen para transformarse. Porque influir no es dictar. Es abrir. Es acompañar. Es dejar que algo nos atraviese para, desde ahí, proyectar.
Bienvenidos a TRESEFES, número 03: La Influencia.
Toda obra tiene un eco. A veces es evidente: una forma que se repite, un gesto que reconocemos. Otras veces es más sutil, como una intuición compartida, un susurro del pasado que aún informa nuestras decisiones. En este número de Tresefes, decidimos detenernos en ese eco. En eso que influye —sin siempre mostrarse— y que, sin embargo, transforma.
“La Influencia” no es un tema menor. Es una pregunta esencial para la arquitectura y el diseño en América Latina, donde cada decisión proyectual está atravesada por capas históricas, tensiones contemporáneas y herencias que se resisten al olvido. No nos interesa la influencia como imitación, sino como conversación. Como diálogo entre generaciones, entre territorios, entre prácticas que se entrecruzan.
Creemos que toda arquitectura es una conversación —con lo anterior, con lo posible, con lo que aún no ha sido nombrado—. Diseñar no es partir de cero, sino aceptar que cada trazo lleva consigo otros trazos, otras historias. Heredamos estructuras, intuiciones, preguntas sin resolver. Pero también tenemos el poder —y la responsabilidad— de transformarlas.
Este número no busca encontrar un origen puro. Nos interesa más bien trazar líneas que se cruzan, tensiones que se resisten a resolverse, influencias que se reconocen para transformarse. Porque influir no es dictar. Es abrir. Es acompañar. Es dejar que algo nos atraviese para, desde ahí, proyectar.
Bienvenidos a TRESEFES, número 03: La Influencia.
Toda obra tiene un eco. A veces es evidente: una forma que se repite, un gesto que reconocemos. Otras veces es más sutil, como una intuición compartida, un susurro del pasado que aún informa nuestras decisiones. En este número de Tresefes, decidimos detenernos en ese eco. En eso que influye —sin siempre mostrarse— y que, sin embargo, transforma.
“La Influencia” no es un tema menor. Es una pregunta esencial para la arquitectura y el diseño en América Latina, donde cada decisión proyectual está atravesada por capas históricas, tensiones contemporáneas y herencias que se resisten al olvido. No nos interesa la influencia como imitación, sino como conversación. Como diálogo entre generaciones, entre territorios, entre prácticas que se entrecruzan.
Creemos que toda arquitectura es una conversación —con lo anterior, con lo posible, con lo que aún no ha sido nombrado—. Diseñar no es partir de cero, sino aceptar que cada trazo lleva consigo otros trazos, otras historias. Heredamos estructuras, intuiciones, preguntas sin resolver. Pero también tenemos el poder —y la responsabilidad— de transformarlas.
Este número no busca encontrar un origen puro. Nos interesa más bien trazar líneas que se cruzan, tensiones que se resisten a resolverse, influencias que se reconocen para transformarse. Porque influir no es dictar. Es abrir. Es acompañar. Es dejar que algo nos atraviese para, desde ahí, proyectar.
Bienvenidos a TRESEFES, número 03: La Influencia.